El gato de Simbad (Las mil y una travesuras)
Durante uno de sus largos y épicos viajes, la tripulación de Simbad noto un extraño ruido en el exterior.
- ¿Los espíritus están destruyendo el barco? - gritó un marinero.
Simbad subio arriba y, tras bajar a cubierta, llevaba al gato cargando.
- No, sólo era el gato que estaba afilando sus uñas en la proa
Y el gato le respondio en su idioma
- ¡¡Miauuuu!! Y yo que pensaba que esto era un gigantesco afilador flotante.
Boa tarde, a historia criativa é excelente.
ResponderEliminarAG
Mil gracias por el cumplido
EliminarEs como se me dijo una vez: Los perros tienen sus amos; Los gatos tienen su personal de apoyo.
ResponderEliminarPor algo me gustan tanto esos animalitos. Gracias por sus excelentes comentarios, Miss Koval.
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